Comprar con antelación
- Comprar uniformes antes del inicio del año escolar permite aprovechar ofertas y descuentos.
- Evita pagar precios más altos de último momento.
Elegir prendas duraderas y de buena calidad
- Materiales resistentes y fáciles de lavar duran más tiempo y requieren menos reemplazos frecuentes
Comprar solo lo necesario
- Hacer un inventario de las prendas que realmente se usan y evitar comprar de más.
- Rotar uniformes según la temporada (verano/invierno) ayuda a maximizar su uso.
Intercambio o reventa entre familias
- Participar en grupos de intercambio o venta de uniformes usados en buen estado.
- Esto permite ahorrar y dar una segunda vida a las prendas.
Cuidado adecuado
- Seguir las recomendaciones de lavado, planchado y conservación para que los uniformes duren más
- Reparar botones o costuras sueltas en lugar de reemplazar la prenda completa.
Considerar conjuntos versátiles
- Elegir prendas que combinen entre sí y puedan usarse en diferentes días o estaciones.
Evitar moda o accesorios innecesarios
- Mantenerse dentro de la normativa del colegio reduce gastos adicionales en ropa de marca o complementos.